Historia del Crochet, Ganchillo o Gancho
La Historia del Crochet, Ganchillo o Gancho ya va a ser contada en imágenes en esta edición, pero existen otras historias relacionadas con el ganchillo, la historia de nuestras abuelas, de nuestra madres... Todas ellas tejian casi desde niñas, nosotras las de nuestra generación en cambio hemos aprendido mucho más tarde, quizás porque se nos quedaron en la retina esas imágenes de aquellas maravillosas mujeres tejiendo y siempre usando las manos para unas cosas o para otras, nunca descansaban.
En mi caso particular tuve cientos de prendas tejidas a ganchillo por mi abuela, me vestía cada día con alguna pieza que había hecho ella misma con sus manos, casi no íbamos a tiendas no lo necesitabamos, la ropa tanto tejida como confeccionada con telas la hacía mi abuela, sus hijas o sea mi madre y mis tías, eran también muy mañosas, y consiguieron ser modistas a muy temprana edad.
Yo no, yo estudie Magisterio, y odiaba hacer manualidades, costuras y tejidos.
Curiosamente salio una plaza para profesorado, hice la oposición, y cuando empece a trabajar en un colegio me toco también dar clases de pretecnología entre otras materias, y entonces como si se me enciendese un botón en el cerebro, y sin saber nada de nada sobre manualidades, o sobre hacer algo con mis manos, como si mi abuela me guiase (ya estaba fallecida) empecé a coser, a tejer, compraba libros para aprender a realizar manualidades, y empece a engancharme, todo esto fue antes de que existiese Internet, porque ahora quizás ya no tenga tanto mérito se aprende todo más fácil.
Solo me queda decir que a veces la vida da muchas vueltas, y lo que odias ahora luego quizás lo ames, y viceversa.
Empezamos con una pequeña historia del crochet, ganchillo, o el gancho para las que somos principiantes, aprender todo tipo de cosas relacionadas con nuestros hobbies es importante, y a veces incluso necesario para desenvolvernos en la vida.
En mi caso particular tuve cientos de prendas tejidas a ganchillo por mi abuela, me vestía cada día con alguna pieza que había hecho ella misma con sus manos, casi no íbamos a tiendas no lo necesitabamos, la ropa tanto tejida como confeccionada con telas la hacía mi abuela, sus hijas o sea mi madre y mis tías, eran también muy mañosas, y consiguieron ser modistas a muy temprana edad.
Yo no, yo estudie Magisterio, y odiaba hacer manualidades, costuras y tejidos.
Curiosamente salio una plaza para profesorado, hice la oposición, y cuando empece a trabajar en un colegio me toco también dar clases de pretecnología entre otras materias, y entonces como si se me enciendese un botón en el cerebro, y sin saber nada de nada sobre manualidades, o sobre hacer algo con mis manos, como si mi abuela me guiase (ya estaba fallecida) empecé a coser, a tejer, compraba libros para aprender a realizar manualidades, y empece a engancharme, todo esto fue antes de que existiese Internet, porque ahora quizás ya no tenga tanto mérito se aprende todo más fácil.
Solo me queda decir que a veces la vida da muchas vueltas, y lo que odias ahora luego quizás lo ames, y viceversa.
Empezamos con una pequeña historia del crochet, ganchillo, o el gancho para las que somos principiantes, aprender todo tipo de cosas relacionadas con nuestros hobbies es importante, y a veces incluso necesario para desenvolvernos en la vida.
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